En Conexa cabe todo el conocimiento del hombre.
El orden, la capacidad de archivo y la posibilidad de crear espacios son los factores esenciales a la hora de equipar una biblioteca.

Con las mesas, los biombos y las librerías Conexa creamos espacios de estudio, consulta y archivo, consiguiendo a la vez un ambiente cálido y agradable.
El usuario de una biblioteca es la persona. De nada servirían los libros si nos se organizan alrededor del hombre.

Entornos de trabajo abiertos, diáfanos, porque el trabajo intelectual no es sinónimo de soledad. Los espacios abiertos se transforman con Conexa en transmisores de silencio que invitan a viajar dentro del mundo del conocimiento y las ideas compartidas. En conexa se ha conseguido un entorno de estudio sin perder la funcionalidad contemporánea.

Orden, clasificación y eficacia. Si el mueble no fuera capaz de desarrollar estos tres principios, las bibliotecas serían espacios estáticos, incapaces de dar una respuesta flexible a las necesidades de cada persona, y el trabajo intelectual dista mucho de ser estático, inamovible... Conexa ha sabido recoger esta necesidad contemporánea: Dinamismo, flexibilidad y adaptación en los espacios de trabajo.